Hay sectores de la oposición que piden juicio político al presidente Javier Milei; otros aseguran insanía mental; traición a la Patria suena en muchas voces, con ruptura de las instituciones y peligro de desintegración republicana. En caso de darse cualquiera de éstas variables ante las tensiones violentas sociales y económicas que provoca el libertario habría que preguntarse: hay plan B, hay equipos y posibles dirigentes que puedan retomar la nave Nacional para girar a un país viable para las mayorías?
Milei ataca a cualquiera que se le cruce, creyendo que él es intocable. Además ataca sin recursos morales ni verdaderos ni éticos. Ataca porque cree que es un paladín, el mismo personaje que vestía hasta hace poco, cuando era cosplayer. Hoy se disfraza de presidente y cumple un rol: el del dios mercado para matar a las personas. Ataca y es atacado, en especial por quienes lo rodean políticamente: Macri lleva la daga asesina, Caputo y Sturzzenegger el plan piloto de desgaste.
En éste contexto en donde la apertura de los mercados expectantes para comprar por dos pesos activos del Estado que el trastornado presidente y sus secuaces desean entregar a manos privadas o para avanzar con toma de títulos de deuda que el tándem económico realiza como salvataje a los bancos y financieras, como ejemplo tenedoras de 40 mil millones de dólares de leliqs, opera además la idea de un presidente que se maneja de manera autocrática y divinizada.
Con la llegada del DNU 70/2023 y la Ley Ómnibus comenzó una saga típica de alguien desequilibrado: disfruta ver sufrir a los demás. Se intensifica ésta forma de generar espacios de poder en sus miles de twetter y, con violencia, atacar a otros que no piensan como él. Luego de ésta Ley Ómnibus prontamente desgastada por inconstitucional y delirante de 900 artículos, una barullo de cosas que parecían no estar ligados, sobresalía su intención oculta: cesión de tierras, de soberanía, dolarización y poderes completos para gobernar sin el Congreso de la Nación por dos años al menos.
Rápidamente volvió a caerse semejante autoritarismo.
Al avance de Milei contra los gobernadores quitándoles recursos, -había dicho que iba a fundir a las provincias-, salió al cruce el gobernador de Chubut, Ignacio Torres recientemente electo por el PRO, coalición que gobierna junto a Milei.
Cual peronista de la primera hora Torres, luego de hacer los reclamos por los fondos quitados por el emperador Milei decidió responder a los agravios y amenazas, con la frase: «si el miércoles nuestra provincia no recibe los recursos no enviamos un barril más de petróleo ni gas». Rápidamente recibió el apoyo de todos los gobernadores patagónicos que sacaron un comunicado conjunto, y que con el nombre del comunicado «provincias unidas del sur» surgió la idea en algunos de una ruptura nacional y de la soberanía argentina.
Luego la respuesta de Torres fue apoyada también por el resto de los gobernadores, salvo el tucumano Jaldo que de peronista tiene los dedos en V solamente. De todas maneras, en éste contexto de pelea por espacios de poder, no son pocos lo que aseguran que Torres sigue siendo PRO que redujo presupuesto para quedar «bien» hasta que le tocaron la principal caja. Sigue siendo Bullrich, y no pocos aseguran que tiene detrás a Macri.
Hace unos días comenzó a tomar visibilización la guerra de Milei contra la provincia de Buenos Aires y el gobernador Axel Kicillof, al quitarse un fondo compensador de miles de millones de pesos. Los senadores representantes de las provincias, y de sus gobernadores solicitaron a la presidente del Senado, Victoria Villarruel llame de manera urgente a sesionar para tratar la Ley Ómnibus, cuestión que la legisladora viene retrasando de manera arbitraria y fuera de los estándares legales del cuerpo, con el fin de que se caiga la idea de tratarlo y perder ésta pelea. Sin embargo el DNU sigue vigente, en parte, y las cautelares y denuncia penales se suman día a día contra el disparate de gobernar sin el Congreso.
Vemos en el horizonte político, en caso que Milei no aguante muchos meses más de gobierno, a algunos dirigentes sobresaliente por capacidad algunos, y otros por poder y rosca: Torres; Kicillof; Llaryora, Macri. Entonces ojo, porque en ésta fórmula de nombres la derecha sigue como un cálculo matemático quitando hojas del árbol para sumar retoños macristas.
El peronismo comienza a rearmarse pero con más críticas adentro que hacia afuera y a su poca gestión durante el gobierno de Alberto Fernández. Los que generan poder y agendas de trabajo deberían encolumnarse, intendentes de la tercera sección electoral de UxP más Kicillof que serán perjudicados para darle mejoras a trabajadores y vecinos de sus Distritos.
La cuestión lógica sería indeclinable: si cae Milei caen todos, el «que se vayan todos» tiene incluido a todo el arco de gobierno. La pregunta en éste caso es: ¿Existen planes de contingencia?¿Saldrán dirigente capacitados para corregir éstos descontrolados signos de locura política antisocial y de mercado, en donde quedan afuera del sistema, en breve tiempo, millones de argentinos y argentinos?
